El daño

En el frío de la tarde, dormiste junto a mi.
En el frío de la tarde, me abrigaste.
En el frío de la tarde, me usaste como almohada.
En el frío de la tarde, dormimos juntos.

Otros puntos de vista.
El recuerdo de la última.
Las insebilidades mal vendidas.
Las guitarras y los acordes mal tocados.

No importaba si es que era verdad.
Para mi solo eran rumores.
Para mi solo eran rumores.
Rumores de los que querían separarnos.

Tal vez ya no me querías.
Tal vez solo me mentías.
Tal vez solo me matabas.
Tal vez solo me ilusionabas.

Tal vez debí matarte.
Tal vez debí dejarte.
Tal vez debí no ir.
Tal vez debí no estar contigo.

Al final y como siempre,
se repite el mismo guión
de mi película de amor,
el daño sin razón.