Tienes la culpa.
Hasta mañana.
¡No!
No fuí hoy, perdón ayer, no porque no me gustaras sino porque no pude.
Quise ir.
Quise besarte y besarte, abrazarte y volverte abrazar.
Tocar tu trasero, delicioso.
Quise que tomes mucho y que los besos mejoren en calidad y en cantidad de pasión.
Pasión.
Y una conversación, sin relación, con el gordo.
Y a la mierda.
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