Otra vez

Empezar esto va a ser bien difícil. Todo parecía tan perfecto. Es más, nadie se hubiera imaginado vernos en esta situación y ojala que tampoco la sepan.

Siempre dijiste que no podrías perdonar a quien te engañara. Ahora mírate. Ahora analízate.
Espera un poco antes de leer esto. Piensa en mi y analiza lo que has hecho.

Ahora me entero. Todos lo saben. Ya no los podré mirar de la misma manera. Ni siquiera creo los voy a mirar.

Me he dejado de preguntar ¿por qué? Ya no lo pienso aunque cuando te imagino en esas circunstancias si. ¿Quién fue? ¿Cómo así?

Respuestas ojala me des. Te conozco y sé que te costará mucho decírmelas, si es que no me mientes.

No puedo echarte toda la culpa. En esta oración te afirmo que yo también.
Fue hace mucho tiempo. No sabía, todavía, lo que sentía por ti. No fue la inmadurez en la que seguramente te cobijaras. Fue la estupidez. Fue el deporte.

Ahora no sueño. Desde hace tiempo me quedé sin sueños. Mi conciencia está sobrecargada. No aguanto más el no decirte la verdad.

Dime tu también la verdad. Aborrezco la mentira. Dime solo la verdad.

Es muy difícil perdonar. Lo sé. Es la segunda vez que lo voy a tener que hacer y no es bonito para nada.

Acabo de escuchar tu voz. Reafirme lo que sentía por ti. Me preocupé al saber de tu situación.

Espera un momento. No se que sientes por mi. La inseguridad está en su auge.

Llorar, ¿otra vez? No lo creo. Durante estos días lo he hecho bastante. Confía.

Aún trato de no pensar en lo que dijiste. Cuando mencionaste ¨ tu problema ¨ del cual no querías que yo sea parte.

No fuiste totalmente sincera. Yo tampoco.

Otra vez. Otra vez.

Empezar de cero parece una buena idea. Todo desde el comienzo. Interprétalo literalmente. Si no me has mentido en lo que me has dicho lo harás. Es demasiado para dos semanas.

Aparentemente sobrevivimos. Aparentemente nos engañamos. Aparentemente fuimos felices. Aparentemente fuimos honestos.